Descripción
La propaganda, bien abordada, puede ser definida como la traducción patente de los deseos diversos pero parecidos que guían a las colectividades humanas actualmente en presencia y en conflicto. En un mundo esencialmente movido por la voluntad de poder (y no sólo, como se admite generalmente, por intereses económicos), la propaganda se convierte en el hecho que sin cesar traiciona las fuerzas ocultas y camufladas; estudiarla en tanto que hecho, es ponerse fuera automáticamente de ella y es sopesar la realidad del mundo actual; el examen crítico de la propaganda se vuelve de ese modo, casi en el sentido religioso, una «revelación».